Por: Leonardo Lin y Leonard Suárez
Amnistía Internacional condenó este sábado la oleada de arrestos de líderes opositores en Venezuela y lo considero una "cacería de brujas" contra la disidencia. "Al parecer el gobierno del presidente Nicolás Maduro continúa con su cacería de brujas contra cualquiera que se atreva a expresar públicamente una opinión contraria a sus ideología" Entre el 11 y 12 de enero fueron detenidos varios diputados que pertenecen a dos de los partidos mayores de la alianza opositora, Voluntad Popular del notorio preso político Leopoldo López y Primero Justicia del Gobernador Henrique Capriles. En la misma oleada represiva, se le revocó la libertad condicional al general retirado Raúl Baduel, antiguo aliado del presidente Hugo Chávez y ex Ministro de Defensa, lo hicieron adversario de Maduro.
Presidente Nicolas Maduro
Los arrestos se produjeron tras la instalación de un "comando antigolpe". La organización usa el argumento de una supuesta desestabilización para intentar acorralar a la oposición que controla el Congreso que tiene bastante respaldo internacional. "La utilización de absurdos argumentos conspirativos para justificar detenciones irregulares demuestra la falta de compromiso de Venezuela con la promoción y protección de los derechos humanos" dijo Erika Guevara, directora para las Américas de Amnistía Internacional. La organización le pidió a las autoridades garantizar los derechos procesales de los encarcelados, "en particular la presentación ante jueces civiles con cargos y pruebas fehacientes en un tiempo expedito, así como el acceso inmediato a sus familiares y representantes legales".
El gobierno asediado por una crisis económica que no hace más que agravarse, el Estado niega que en Venezuela existen presos políticos sino opositores encarcelados por conspiración, violencia y otros delitos. Se puede entender que en Venezuela está creciendo un clima de intolerancia generalizada, el gobierno de Maduro está usando estrategias con rasgos autoritarios. El gobierno está desatando persecuciones políticas y está encarcelando a líderes opositores, que es un acto muy antidemocrático. Lentamente se está armando una fuerte tensión política, también porque la oposición no encuentra canales de expresión, todos los medios están controlados por el estado, la gente está perdiendo sus derechos humanos.
Protestas contra el gobierno
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